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Qué es el pecado?


Que es el pecado mortal?

Es una falta contra la razón, la verdad, la conciencia recta; es una falta al amor verdadero para con Dios y para con el prójimo, a causa de un apego perverso a los bienes.



El pecado es una ofensa a Dios: como el primer pecado, es una desobediencia, una rebelión contra Dios por el deseo de hacerse 《como dioses》, pretendiendo conocer y determinar el bien y el mal (Gn 3,5). El pecado es así 《amor de sí hasta el desprecio de Dios》(San Agustín, civ. 1, 14,28). Por esta exaltación orgullosa de sí (esta es naturaleza propia del pecado), el pecado es diametralmente opuesto a la obediencia de Jesús que realiza la salvación (Cf. Flp 2, 6-9).



En la pasión, la misericordia de Cristo vence al pecado.


El pecado mortal destruye la caridad (o sea la presencia de Dios) en el corazón del hombre por una infracción grave de la Ley de Dios; aparta al hombre de Dios, que es su fin último y su bienaventuranza, prefiriendo un bien inferior (porque siempre es una opción moral). El pecado venial deja subsistir la Caridad pero la hiere.

Qué se requiere para que un pecado sea mortal?

La materia grave es precisada por los diez mandamientos.


El pecado mortal requiere plena conciencia y entero consentimiento para ser una lección personal. La ignorancia afectada y el endurecimiento del corazón (Mc 3, 5-6; Lc 16, 19-31) no disminuyen, sino aumentan, el carácter voluntario del pecado.



La ignorancia involuntaria puede disminuir, si no excusar, la imputabilidad de una falta grave. Los impulsos de la sensibilidad, las pasiones, pueden igualmente reducir el carácter voluntario y libre de la falta, lo mismo que las presiones exteriores o los trastornos patológicos.


El pecado por malicia, por elección deliberada del mal, es el más grave.

Cuáles son los pecados contra la virtud de la religión?

Ateismo: la negación de Dios. 《En cuanto rechaza o niega la existencia de Dios, el ateísmo es un pecado contra la virtud de la religión (Rom 1,18) la imputabilidad de ésta falta puede quedar ampliamente disminuida en virtud de las intenciones y de las circunstancias. En la génesis y difusión del ateismo puede corresponder a los creyentes una parte no pequeña; en cuanto que, por descuido en la educación para la fe, por una exposición falsificada de la doctrina, o también por los defectos de su vida religiosa, moral y social, puede decirse que ha velado el verdadero rostro de Dios y de la religión. Más que revelarlo (CEC 2125).



Agnosticismo: indigencia ante Dios. En el campo de la moral el agnóstico profesa una ética independiente de toda instancia externa a él.



Las blasfemias: es una injuria directa de pensamiento, palabra u obra contra Dios. Esta también puede ser contra los santos, el imperdonable pecado contra el Espíritu Santo y el uso vano del nombre de Dios.



Sacrilegio: es el uso indebido de lo sagrado (profanación) hay tres clases:


Sacrilegio personal: cuando se dirige a una persona consagrada.


Sacrilegio real: cuando se usa indebidamente de las cosas dedicadas al culto.


Sacrilegio local: profanación de lugares sagrados.



Superstición: otorgar una fuerza mágica a ciertas prácticas rituales que en sí son buenas.


Idolatría: divinidad a las criaturas (hombres, animales o cosas) y darles culto.


La adivinación: su moralidad radica en dos fuentes:


En el deseo de conocer el futuro, aceptándolo como un fatalismo que determina la libertad humana y en contra de la providencia amorosa de Dios.


El uso de los mediums para adivinar el futuro.


Las sectas, la masonería y el perjurio, que entraña siempre una falta moral cualificada, por cuanto supone apelar a la dignidad de Dios para garantizar un asunto de hombres